El primer disertante un Abogado, hombre de consulta en estrados internacionales, luego de varios considerandos y resultantes, establece que tomará el caso y que luego de las consultas pertinentes a los Códigos y legislación vigentes y a la jurisprudencia nacional e internacional, emitirá su opinión.
El segundo, un médico, profesor de máxima jerarquía, intensivista, cirujano, entre otros post grados, reconocido mundialmente, decide considerar la consulta y manifiesta, que luego del estudio correspondiente de la historia clínica, análisis de laboratorio, tomografías, resonancias y junta médica, emitirá su opinión.
El tercero, Contador Público, Economista, muy expeditivamente repregunta ¿cuánto quiere que le de?...
Bueno... ahora razonando las tres decisiones, creo que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), se inclina por tomar la del Contador Público y sus estadísticas presentan números y sumas a pedido de quien las va a exhibir.
El Contador Olesker, contentísimo, cuenta que la ex-presidente Chilena, Sra. Michelle Bachelet, le felicitó por el excelente abatimiento de la pobreza y otros números uruguayos.
Quizá la señora Bachelet, no tuvo oportunidad de enterarse del aumento exponencial de los asentamientos que brotan imparables en los alrededores de la mayoría de las ciudades. Y lógicamente los números anotados por el Contador, dicen las maravillas que le alegran.
Quizá le contaron que tenían un "plan", aunque hace más de un año que con bombos y platillos lo anunciaron, para hacer viviendas dignas para los habitantes de Las Láminas en Bella Unión, departamento de Artigas.
¿La habrán llevado a Rincón de Rolón en el departamento de Tacuarembó? Bueno... quizá el señor Olesker ni sepa que existe.
Tampoco oficialmente se le habrá informado, de la pobreza de los centros de enseñanza, que reciben en situaciones calamitosas a los niños, muchos mal comidos, que serán promovidos por razones sociales y no por los progresos en el aprendizaje.
Lógicamente no se habrá enterado, que una gran parte de los que consideran salidos de la pobreza, lo han hecho respaldados por la permisividad, delinquiendo (rapiña, narcotráfico, copamientos, robos, asaltos...).
Que hay más gente hurgando en los contenedores de basura y más niños y adolescentes changando en los semáforos y otros tantos dirigidos por sus mayores, mendigando, de eso, ni por asomo fue enterada la Sra. Bachelet.
Menos le habrán dicho que en la encuesta que realiza el INE, hay una pregunta que distorsiona la realidad. Puesto que si un ciudadano desocupado, realizó durante la última semana una changa, por ejemplo entrarle una carga de leña al vecino por lo que le tiraron con $ 50.00, o le limpió el jardín y se ganó $ 80.00, es considerado "en actividad". No señor Olesker, por una changa de $ 80,00 en la semana, no puede considerar que un jefe de familia deja de ser un desocupado.
Ni hablemos de las encuestas e informes sobre inflación. El gobierno dice "la inflación no llega a dos dígitos" creo que la están situando en un 5 o 6%, pero resulta que todas las semanas llegan las modificaciones a las listas de precios, siempre con subas y los minoristas, somos tomadores de precios y tenemos que subir nuestras mercaderías. Eso ¿no es inflación?
Que los sueldos y las jubilaciones subieron, es cierto, pero... ¿y los precios?
¿Será que bajaron los pobres o bajaron los que se estaban salvando y ahora entraron a engrosar esa franja?
No le vamos a pedir sinceramiento a un gobierno que se ha caracterizado por mentiroso, así que seguiremos tomando con pinzas las estadísticas, no para considerarlas sino para desecharlas por inútiles.
Y así van las cosas, Organismos internacionales ponderan los "progresos" uruguayos, seguro, desde lejanos escritorios moqueteados, analizando cifras muy bien maquilladas o haciendo "trabajos de campo", dentro de cuatro paredes del Ministerio analizando las misma cifras.
Si no, fíjese en el papelón del Censo, el famoso, el de "Setiembre mes del Censo". Como buenos imitadores de los vecinos de allende el Plata, nuestra INE, se amolda muy bien al INDEC.
Lo dijo el Presidente, en muchas oportunidades: no sea nabo. Y bueno Presidente: no somos nabos y nos damos cuenta de esos cuentos.
Aunque lamentablemente, hay una gran porción de nuestra población presa por el asistencialismo castrante del Sr. Olesker, limitada a no pensar y presta para acercarles su voto cautivo, como lo dijo el Senador Rubio, cuando lo precisen.
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