Sorprendidos por la audacia de los incapaces, nos encontramos con el desagradable hecho pergeñado por quienes al no tener virtudes a exhibir, latrocinan las ajenas.
El Frente Amplio tuvo el descaro de lanzar un spot publicitario en el que aparecen además de sus "hombres ejemplares" varios reales constructores de la nacionalidad oriental, menoscabando de esa manera la enorme valía que tuvieron para con la Patria.
Los descarados no tuvieron mejor idea que afirmarse en hombres de los Partidos Nacional y Colorado para promocionar la candidatura del oscuro Tabaré Vázquez.
Aparicio Saravia, Wilson Ferreira Aldunate y Héctor Gutiérrez Ruiz, preclaros nacionalistas, fueron irrespetados por el Fraude Amplio, que como siempre al no tener propuestas de futuro ni hechos del pasado de su propia fuerza política, para avalar a sus candidatos, recurre a las figuras de los partidos fundacionales.
Aparicio, su lucha fundamental fue por la defensa de las leyes; el FA permanentemente viola la Constitución de la República (creando a sabiendas, leyes inconstitucionales; desconociendo el ordenamiento jurídico para la disposición de gastos; interviniendo en política partidaria el Presidente de la República y sus Ministros y demostrando en todos sus actos el criterio antidemocrático de que lo político está por encima de lo legal).
El Toba Gutiérrez Ruiz, hasta su asesinato, luchó contra la dictadura cívico-militar instaurada en el País y Wilson en su lucha recorrió el mundo denunciando los atropellos que se cometían contra la libertad, la justicia y la ciudadanía en general, haciendo conocer en los principales foros internacionales la realidad uruguaya y dejándonos un bagaje de enseñanzas republicanas y de amor a la Patria incomparable; mientras, el FA apoyaba la dictadura, Tabaré Vázquez era funcionario privilegiado del gobierno de facto y Mujica y sus actuales ministros negociaban con los militares la traición a sus propios camaradas.
Lógicamente, ¿qué pueden exhibir?... NADA. Una caterva de asesinos, ladrones, copadores, que intentaron destruir el País para apoderarse del poder por las armas; que luego en el Club Naval pactaron con los militares representantes de la Dictadura, la prisión de Wilson y su propia amnistía; evidentemente no tienen NADA, ABSOLUTAMENTE NADA, para exhibir y enorgullecerse.
Estos personajes que se encumbraron en el poder en base a sus mentiras y engaños, aprovechando la débil democracia recién reconquistada, que destruyeron nuestra enseñanza, nuestra salud, nuestra seguridad, que casi hacen desaparecer la pujante clase media uruguaya productora de la riqueza del País, que condenaron a la miseria y a vivir en una eterna pobreza, a una parte de la población que vivía en condiciones de estrechez pero con el orgullo de superarse, castrándola con planes de limosna deslindando su capacidad de trabajo; no tienen nada más que sus mentiras, sus cuentos de la utopía.
Exhiban el aumento de la marginalidad, con un crecimiento desmedido de los asentamientos irregulares, la cantidad de compatriotas que deben hurgar en los contenedores de basura en la búsqueda desesperada de algo para comer o reciclar. Exhiban la ineficiencia del Poder Ejecutivo que durante más de cuatro años no fue capaz de reglamentar la Ley 18651 que aportaría mejor calidad de vida a 500.000 compatriotas que padecen discapacidades. Exhiban la prioridad de su gobierno de legislar para grupúsculos con el claro propósito de la cosecha de votos.
Exhiban la corrupción en PLUNA, ANTEL, ALUR, CASINOS, HOTEL CARRASCO, POLO TECNOLÓGICO DEL CERRO Y DE LAS MÁS DE CIEN SOCIEDADES ANÓNIMAS PROPIEDAD DE ENTES DEL ESTADO QUE NO PUEDE FISCALIZAR EL TRIBUNAL DE CUENTAS NI EL PARLAMENTO.
Finalmente, EXHIBAN SU INEFICIENCIA y la INEFICACIA DE SUS POLÍTICAS.
