Cuando hay dolores intestinos y fuertes movimientos viscerales dentro del Frente Amplio, es necesario, diría casi imprescindible, crear una gran cortina de humo para que pasen desapercibidos o por lo menos no sean tan evidentes.
Pero también las cortinas de humo son aptas para disimular (o tratar de disimular), la inoperancia o simplemente incapacidad e incompetencia del gobierno, que no acierta en nada. Para avalar este aserto, basta con mirar la situación de la salud, la enseñanza, la seguridad y la infraestructura.
Y muchas veces sirven también para disimular ambas, cuando los hechos políticos o de gobierno, desencadenan pujas dentro de la "fuerza política" dejando al descubierto las liviandades con que tratan de gobernar el País.
Esta vez la fumata sirvió para este combo. Aunque no tanto, porque fuimos muchos los que desde que Mujica empezó a armar el primer porro ya dijimos que era otra gran cortina de humo.
Y tienen suerte los condenados. Pensar que les cae como una bendición del cielo, la crisis de Paraguay, que como distracción, junto con la marihuana ayudó bastante para mantener a toda la prensa bien entretenida.
Mientras tanto, una tremenda crisis educativa, con paros escalonados en todo el País, con algunas ocupaciones de liceos, una huelga de hambre de un grupo de profesores; una Rendición de Cuentas en plena elaboración, cuestionada por varios gremios ante la pasividad del PIT CNT (brazo sindical del gobierno); el Hospital Pereira Rossell por cerrar el sector pediátrico y neonatal, con los médicos casi rogando soluciones imprescindibles para evitar muertes de recién nacidos, ante la pasividad inhumana de las autoridades; la delincuencia desbordada, ante la inoperancia de un Ministro que hasta hace un par de semanas aseguraba que no era tal y culpaba a la prensa de crear alarma pública y que en ocasión de la presentación pública de las "15 medidas", como un eximio contorsionista la reconoce...
Claro que una buena cortina de humo era necesaria y se inventaron la legalización de la producción, elaboración y venta de marihuana, que desató una polémica a nivel mundial que dio mucho material a la prensa.
Pero el humo de esta fumata ya se está disipando y quizá podamos ver con más claridad las cosas. Bueno... las cosas... o decimos "las medidas", las quince, lógicamente.
Que pretenden nuestros sabios gobernantes? Para saberlo, lo mejor será verlas, no solo en los titulares, que con tantas contradicciones nos informaran los integrantes del Gabinete de "Seguridad" Ampliado.
Las de peso, ya habían sido propuestas por los Partidos Tradicionales y dormían en algún cajón de las Comisiones Parlamentarias, sin siquiera haberlas abierto, el resto, sabor a muy poco, casi una vacua relación de ambigüedades que muy poco harán por mejorar la seguridad. Veinte páginas con incoherencias y contradicciones muy difíciles de digerir y entre ellas la liberalización de la producción, elaboración y venta de marihuana, la gran cortina.
Indudablemente las elecciones internas del FA, flacas en participación, produjeron movimientos viscerales dolorosos, con duros enfrentamientos, que había que disimular. La brutal bofetada aplicada por el Partido Socialista y el astorismo unidos, al mujiquismo, está siendo muy duro de digerir. Algunos despidos, por más que Mujica diga que fueron para evitar la "burocratización", dolieron. La electa Presidente del FA y el Vicepresidente ya anunciaron que no corre más la votación de leyes a tapas cerradas.
Hace unas pocas horas, algunos grupos frustraron la propuesta de aumento de penas a menores infractores, debiendo, el Presidente, renunciar a la misma.
Pero no solo los problemas viscerales del FA requerían cortinas.
Tropas venezolanas, ingresaron al País sin autorización parlamentaria, para "instruir" a nuestro Ejército Nacional, con una arenga final de evidente corte político (de izquierda, lógicamente).
Media sanción, con los únicos votos del FA, de una ley sobre Sociedades Anónimas prohibiendo las acciones al portador, que alejará inversores, principalmente inversiones inmobiliarias de argentinos, atendiendo presiones de Cristina K en la OCDE.
Mientras nuestros gobernantes siguen postrándose ante el gobierno argentino, siguen trabando nuestro desarrollo y la actividad de los puertos de Nueva Palmira y del Río Uruguay, por la negativa al dragado del canal Martín García.
Pero además, algunas contradicciones, desnudan incoherencias:
Luego de analizar el "documento" con las medidas, sí, nos internamos en un terreno, que en parte parece ser reino de arenas movedizas. Pero empecemos por el principio.
En poco más de dos días, los integrantes del gobierno y principalmente los del Gabinete de "Seguridad", se contradijeron públicamente sobre cual es el real pensamiento sobre la marihuana y esta tan novedosa apertura gubernamental. Y hasta parecen lógicas estas contradicciones, puesto que la propuesta surge de un grupo evidentemente muy desinformado, incluso desinformado de las propuestas o ideas o conocimientos de sus pares del gabinete.
Fue todo cocinado entre este grupo de "señores" que actúan desde detrás de sus escritorios, en sus confortables poltronas, sin siquiera haber consultado a los técnicos o más conocedores del tema, que integran organismos encargados de la prevención y represión del consumo y tráfico de estupefacientes, tales como la Brigada Antidroga y la Junta Nacional de Drogas.
Olesker, en la conferencia de prensa manifiesta que "hay países incluso de la región que ya iniciaron el camino de separar los mercados”. Se equivoca, en la realidad ningún país de Latinoamérica lo está haciendo.
Fernandez Huidobro, manifestó que el registro de consumidores no está decidido y considera una medida fascistoide.
El Presidente Mujica, dijo en Brasil (Ver Diario El Globo) que se controlará mediante registro de consumidores y origen de la droga. Que deberán consumirla y no podrán venderla porque los controles lo detectarán.
En principio manejaron vender 40 cigarros de marihuana por mes a cada adicto, luego según UNoticias, citando fuentes del Ministerio del Interior, sería venta sin límites, pero más tarde parece que serían 36.
El Presidente dice además en Brasil, que los adictos deberán devolver las "boquillas" de los cigarrillos para nueva compra, mientras que ahora se dice que la droga se venderá a granel para fumarla, inhalarla, o incorporarla a comidas.
En fin, se disipan los humos de la fumata y aparecen nuevamente los problemas reales, cotidianos, que el gobierno no sabe resolver. Seguirán las polémicas, que un porro menos o uno más, que legalizar o que no, pero los delincuentes seguirán asolando la sociedad; la gente honrada encerrada entre rejas, alarmas, perros y guardianes y los delincuentes sueltos rapiñando, copando, matando; el Ministro con su letanía de murmullos, incapaz de acertar en una solución; el Presidente cada día de peor humor, maltratando a la prensa y a la ciudadanía y destrozando el rico idioma español; la primera dama lanzando sus dardos a diestra y siniestra; y todos esperando que pasen rápido estos dos años y medio.
