La tecnología informática y de la comunicación ha introducido también, una nueva forma de delinquir, la ciber piratería.
Esta sofisticada forma de atentar contra la sociedad, se ha dado, en simples invasiones de virus informáticos detectables por cualquier software antivirus y de fácil solución, hasta invasiones masivas a centros de poder mundial, con perjuicios muchas veces imposibles de evaluar adecuadamente.
Incluso hay organizaciones de hackers, verdaderas asociaciones para delinquir, que han interceptado o alterado informaciones vitales para los Estados o para Organizaciones de Estados.
Estos "señores", de un dominio increíble de la informática, en determinados momentos, quizá cegados por su capacidad casi sobrenatural, llegan a creerse verdaderos Mesías. A la vista está, al no concordar con condiciones de rescate de la economía griega, el grupo "Anonymous" el 1 de junio corriente anunció en su Twiter la "Operación Grecia" donde se invitaba a atacar la página Web del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Según The New York Times, el día miércoles, el FMI anunció a su Junta Directiva que "había sido objeto de un complejo ataque infortmático de dimensiones desconocidas" aunque se le calificó de "muy serio y complejo".
A pesar de que según sus propias informaciones, el FMI opera plenamente, aún no se han establecido los perjuicios ocasionados. Pero considerando que el Fondo es depositario de información financiera y fiscal de muchos países, por lo tanto de gran sensibilidad, un ataque de tal naturaleza puede llegar a ser hasta caótico, si la información es usada desaprensivamente o con dolo. En definitiva, se ha abierto una brecha en la seguridad del Fondo, que debe poner al mundo en alerta extrema, por consecuencias inestimables.
También como agravante, se debe considerar que según un funcionario, no identificado por The New York Times, los ataques por esta brecha de seguridad se han realizado durante los últimos meses, o sea que el flujo de información o su alteración no se produjo en un solo acto, sino que ha sido una actividad sostenida por varios meses.
Hay varios países con dificultades financieras o económicas y el FMI está al frente de sus programas de rescate, tales como Portugal, Irlanda y la propia Grecia, dejándolos en una posición muy delicada, quizá al borde de una crisis.
Como consecuencia de este ataque informático, el Banco Mundial (BM) que comparte información y mantiene un fluido intercambio con la institución afectada directamente, optó por desactivar el sistema de conexión entre ambos.
Por la magnitud de las posibles consecuencias del ataque al FMI, ha ocupado un lugar de destaque en la prensa especializada, aunque no es el único que se ha producido en los últimos tiempos.
El viernes de la semana pasada, fueron detenidos en España tres sujetos sindicados como coordinadores y participantes de decenas de ciberataques, que hicieron colapsar servidores de gobiernos, marcas comerciales y empresas en varias partes del mundo. Consecuencia: la policía española vio caer, en la madrugada del domingo, su sitio en Internet. El ataque fue reivindicado por Anonymous.
En el domicilio de uno de los detenidos, la policía incautó un servidor que fuera usado para ciberataques a los gobiernos de Chile, Irán, Libia y Colombia, al banco BBVA y a la compañía italiana de energía Enel.
La red PlayStation Network, también fue atacada, aunque ningún grupo ha reivindicado el hecho. En este ataque ocurrido en el mes de abril, millones de usuarios del sitio, tuvieron sus cuentas con sus datos personales expuestos y a merced de los piratas informáticos.
Estos grupos de hakers o piratas informáticos, utilizan las brechas en las seguridades de la red, para hacerse de contraseñas de usuarios, números y códigos de cuentas bancarias, creando un estado de inseguridad y exposición a todos los que por distintas razones debemos conectarnos a Internet.
Es evidente que una gran porción del planeta no cuenta entre sus organismos de seguridad con personal y equipos suficientemente capaces para lidiar con esta clase de criminales y debemos convivir expuestos a ellos, por lo que el uso de la red debe hacerse muy juiciosamente, evitando exposiciones inútiles. Toda precaución será bienvenida y puede ser eventualmente la protección de nuestros propios intereses.
Fuentes: The New York Times y Bloomberg News.
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