BAILAR CON LA HERMANA

Dícese que es aburrido, sin emociones, que no despierta ningún interés. En definitiva "no vale la pena bailar con la hermana, mejor quedarse en casa".

Ese es el concepto que tiene el "Presidente de todos los uruguayos", pero refiriéndose figurativamente a la concurrencia a votar en las elecciones internas de, según sus palabras, "nosotros los frenteamplistas".

Aclaremos para que no hayan interpretaciones erróneas: las últimas tres palabras del párrafo anterior fueron dichas por el Sr. Mujica refiriéndose a "ellos" los frenteamplistas.

El uno de junio próximo, elegimos los CANDIDATOS ÚNICOS de los partidos políticos a la Presidencia de la República y las integraciones de las Convenciones Nacionales y Departamentales de cada colectividad.

El aburrimiento de Mujica, vendrá por estar acostumbrado al verticalazo, dedazo, o como le quieran llamar. Para ellos el monacal Vázquez es EL CANDIDATO y ¿la señora Moreira? ¿en su intimidad mental, que será?

Es evidente que si bregan por destruir la democracia en el País, la destrucción de la democracia interna de los partidos políticos es consecuencia natural y también es evidente que en su mentalidad anida el ansia de adelantarla.

No son obligatorias legalmente, pero es una obligación moral, democrática, ejercer el voto para elegir qué candidato nos represente y elegir también las autoridades principales de nuestros partidos políticos.

Eligiendo podremos alabar las buenas decisiones y reclamar por las erróneas de quienes gobiernan. Podremos controlar con autoridad moral, porque incidimos en el resultado electoral.

Sin embargo, adoptando la posición del Sr. Mujica, actuando con su aburrimiento, quedando como diría él, "apolillando", en casa, no podremos ni alabar ni reclamar acciones del futuro gobierno.

VOTEMOS, no importa por qué partido, ejerzamos ese maravilloso derecho que nuestros mayores conquistaron, incluso con derramamiento de sangre en las cuchillas de la Patria, para poder vivir en un País libre, democrático, republicano y respetuoso del Derecho.

Cuando estemos en el cuarto secreto introduciendo nuestras listas en el sobre, seguramente no nos parecerá que "bailamos con la hermana", sino que estaremos inundando nuestro Uruguay de libertad y democracia.

Que quede el Sr. Mujica con su mediocridad y deje a los orientales disfrutar de su vida libre y democrática. Que siga con sus zonceras tras su utópico Nóbel.