INAPELABLES

"Los números son inapelables y allí están. No son los únicos elementos de redistribución, pero sí la historia del salario es el primer gran elemento distribuidor de la riqueza en un país como el nuestro”, lo dijo el Presidente de la República Sr. Mujica.

Y tiene razón, los números son inapelables, veamos:

Subieron los sueldos, y también las jubilaciones, pero... siempre hay un pero... ¿qué ha pasado con el costo de vida?

Inapelablemente, subió porcentualmente mucho más que los sueldos y las jubilaciones, para comprobarlo basta visitar cualquier supermercado con los que acordó el gobierno una "congelación" de precios para “controlar” la inflación  y luego de realizar las compras cotidianas, comparar con lo que compraba hace unos diez o quince años y estimar el rendimiento de su sueldo o jubilación actuales.

Otros números inapelables son los que cuantifican el enorme crecimiento de los asentamientos en los últimos diez años, la cantidad de gente hurgando en los contenedores de basura en búsqueda de algo para reciclar o comer.

Podemos apelar a la inapelabilidad de los números para apreciar el aumento de la inseguridad, con más copamientos, más asaltos, más rapiñas, más hurtos, más asesinatos.

Más números inapelables tenemos en la educación: más repeticiones, más deserciones, menos cultura, menos educación, más NI NI... bueno...éstos fueron creados por el frenteamplismo, más injerencia de las corporaciones gremiales.

Podemos agregar, que también en la salud los números son inapelables: menos camas, menos CTI, más muertes en las emergencias, más esperas para consultar especialistas (y también médicos generales), más cara, menos eficiente.

Otra también muy lamentable, más corrupción (PLUNA, casinos, ALUR,  DGI/Casal, licitaciones ¿?, INAU (Denuncia de Padre Mateo), contrataciones artísticas de ANTEL y ANCAP, Dirección Canal 5, ocultamiento de propiedades en Declaración de bienes por un Vicepresidente, y más, más, etc., etc.).

SI señor Presidente, usted tiene razón, LOS NÚMEROS SON INAPELABLES.